Mi amiga Hortensia dice que en
Navidad todo es posible, hasta que las amigas cibernéticas se vean las caras,
se toquen, se abracen por fin, y se reconozcan después de tantos y tantos
correos por la red.
Pero fieles a nuestros objetivos
no podíamos quedar sin hacer gala de todo lo que nos une, y por tanto, nuestro
motor, la que nos lanza a la increíble aventura de viajar por los bites y
bytes, y se enfada porque somos perezosas y no estudiamos nada, y preguntamos
siempre lo mismo, y perdemos los +1 y no sabemos subir las fotos decentemente,
nos mandó un documento de
posicionamiento NEO (Navidad Extraordinariamente Organizada).
Sin ningún afán de provocarla,
pero con las prisas, me dejé en casa el manual, me acordé de casualidad del
lugar y hora de la cita, y me olvidé por completo, por puro despiste, de
expectativas, interrogantes y dudas sobre cómo saldría el experimento.
Antes de nada os comentaré que en
mi vida he tenido dos citas a ciegas, la primera me salió redonda y la segunda.....
Llegué la primera (ya podría
haber sacado de británica alguna otra cualidad que no fuera la puntualidad, no
sé, quizá un don innato para el idioma…). Ni dos segundos duró esa sensación
incómoda de no saber qué decir, por dónde empezar, porque a partir de ese
momento, me encontré felizmente noqueada por un espíritu libre, lleno de
energía vibrante, como un huracán que te sacude…no, más bien hipnotizada.
Cuando llegaron mis otras dos ciber-amigas, comprendí que una de ellas bullía
como sus ollas, llena de vitalidad, pensé que nunca encontraría a alguien que
tuviese la risa más fácil que la mía, y la otra no podía dedicarse a otra cosa
que a hacer arte con la plata, es, en esencia una artista sin artificios.
Mientras, nosotras a lo nuestro, a
llenar el estómago en este Madrid navideño atestado de gente en estado, unos de
embriaguez, otros de compulsión consumista, los más, con los enanos deambulando
de un sitio a otro. Pero era lunes y teníamos el tino un poco desviado, así que
cada sitio que se le ocurría a nuestra intrépida ciudadana del mundo estaba
cerrado. Es un misterio que ella haya llegado a la edad adulta sin haber
sufrido un atropello mortal, eso que seguro que ha estado en ciudades más
peligrosas que la mía y con un tráfico más caótico, pero su manera de cruzar es
simplemente suicida.
Acabamos comiendo un bocata de
calamares, típicamente grasiento, en un bar típicamente abarrotado de gente, y
nuestra artista haciendo malabares para no arrojarnos por segunda vez la copa
de vino, la primera había caído por milímetros fuera de la máquina de fotos
nuevecita de nuestra visitante. Nuestra cocinera, nueva emprendedora y seria
aspirante a un trabajo por cuenta ajena tiene una vida que es un sainete y un
humor y alegría vital a prueba de bombas.
Sin humor no hubiese sido posible
que personas adultas, maduras, vamos…señoras (aggg, me sigue sentando fatal),
se pusiesen unas pelucas de colores mientras se hacían las fotos pertinentes
con el chino que las vendía, y paseasen sus testas coloreadas por la Gran Vía, entrasen
en una taberna muy chic dando el cante, lo que sirvió para que las invitasen a
las copas.
Y por casualidad se me ocurrió
decir que tuve un grupo de danza del vientre que era tóxico, era una panda de
marujas asesinas, entonces, mi querido huracán, tuvo un arrebato, llamarnos
marujasasesinaspuntocom (seguro que ya está registrado), pero doy por sentado
que encontrará otra variante que nos vaya al pelo.
Me fui como si en vez de seis horas hubiesen pasado seis minutos, y para
no ponerme sentimental solo os diré que mi segunda cita a ciegas...también salió
REDONDA.
Precioso y lleno de todo el cariño que destilaba cada momento que cuentas...de hecho, se me han saltado las lágrimas leyendo este post. Muchas gracias por permitirnos volver a vivirlo de alguna manera.
ResponderEliminarQué guapa, me ha encantado leerlo y lo de llamarme huracán te juro que es algo nuevo ;) "Os-tia", qué bueno!
ResponderEliminarPor cierto: si, ya está registrado marujasasesinas.com, es NUESTRO!
Hortensia!!! Esperaba con ansia tu nuevo post de la semana... ¿cómo se puede sintetizar tan bien y con tanto cariño una cita tan especial? Qué bien escribes, cachis en la mar.
ResponderEliminarEmy, jajajaja, me parto contigo! Te juro que me dolían los mofletes cuando llegué a mi casa de tanto reírme... ¿habéis visto Toy Story 2? pues me sentía como la barbie al final de la peli jejeje
Pilar, guapa!! Comparto contigo la sensación de conocernos desde hace millones de años...
Amigas bloggeras!!! Sois la ostia jeje, como diría Emy
A la siguiente espero quedarme hasta el final...
Un abrazo.
Todo esta dicho si no quiero ponerme cursi, porque sois Increíbleeesssssssssss
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